La fibra de madera proporciona un rendimiento excelente para el aislamiento térmico y es también muy eficaz como aislante acústico, especialmente en lo que respecta a ruido aéreo. Este material natural y renovable tiene la propiedad de absorber los sonidos, cualquiera que sea su rango de frecuencia. Excelente aislamiento térmico en invierno, así como la fibra de cáñamo o la lana de algodón. La diferencia real es en verano: la fibra de madera es el mejor aislamiento para preservar la casa del calor.

Los aislantes en fibras de madera se ofrecen principalmente en forma de paneles rígidos de diferente densidad, pero también hay paneles semi-rígidos. Como para los aislantes de tipo vegetal, deben ser protegidos de la parte habitable por materiales no combustibles, como el yeso. El uso de estos paneles de aislamiento está destinado para techos, pisos y paredes.

El único inconveniente de este tipo de aislamiento es su elevado coste.